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sigo a contracorriente

No sabe, no contesta

Existe un programa concurso en la Sexta que presenta Micky Nadal, que me gusta mucho. Lo ponen los fines de semana a las nueve y media de la mañana, así que supongo que no lo veis ninguno, pero podríais grabarlo. Hacen preguntas relacionadas con encuestas de internet principalmente, es interesante y entretenido. Pero, sobretodo, te ríes mucho con los comentarios del presentador. Además ahora lo están haciendo actores a beneficio de ongs.

Tengo una duda moral, sin embargo, con este canal de televisión. Por una parte, me parece original y bastante gracioso, así que lo vemos habitualmente. Por otra parte, cuando llegan los anuncios, veo partes de otros programas que me ofenden. Me siento como un globo al que alguien se empeña en pinchar todo el tiempo, porque sí, sólo para ver cuánto aguanta antes de estallar. Lo que ocurre es que, como católica, me niego a dejarme llevar.

Me pregunto que pasaría si un programa de alguna televisión se dedicara a hacer burla del islamismo. Me imagino que inmediatamente lo retirarían, pero si se trata de la creencia mayoritaria en España, entonces ya no importa. Si a alguien se le pasara por la cabeza criticar al Partido Comunista, hablarían de ello hasta en el parlamento, pero criticar a la derecha es gratis. Es como lo de los elefantes en la tela de araña, como ven que no se caen, siguen subiendo elefantes.

Una cosa es tener sentido del humor y otra no darse cuenta del continuo bombardeo que hace esta cadena contra un sector de la sociedad que, les guste o no, existe y también tenemos sentimientos y derecho a la tranquilidad. Estoy convencida de que se puede seguir haciendo buenos programas sin necesidad de ofender a nadie. Aún así yo he seguido viendo Sé lo que hicísteis o La Tira, pero me temo que llegará un momento en que decidamos no conectar más con ese canal y entonces los que salgan perdiendo serán ellos.

La crisis para niños

La crisis para niños

El otro día escuché esto en la radio:

"Había una vez unos ricos muy ricos que convencieron a unos pobres muy pobres de que podían vivir como ricos pagándolo todo a plazos. Así que los pobre empezaron a pedir créditos para comprarse casas, coches, viajes al extranjero y aparatos electrónicos de todo tipo. Pero el problema es que no vivían como ricos muy ricos, que gastan parte del dinero que tienen, sino como ricos que gastan todo el dinero que no tienen; y, como no podían pagar sus deudas, dejaron de consumir. Por eso llegó la crisis.

Diálogo. La recesión llama a la puerta:

Hola. Soy la recesión. Déjeme entrar.

No puede entrar. No tengo sitio. --- Me puedo meter en la nevera que está vacía --- No, porque mi mujer ha ido al mercado --- Pero sólo ha comprado comida para un día --- Pero Solbes ha dicho que no se esperaba a la recesión --- Pues, ya estoy aquí, déjeme entrar --- No puede pasar, esta es mi casa --- Tiene hipoteca a treinta años, así que es del banco --- Pero tengo un billete de lotería de Navidad que me va a tocar --- Está bien, volveré después de navidades ---

¿Y por qué no se va (la recesión) con su familia? --- como todos se dedican a lo mismo están desperdigados entre los bancos, las inmobiliarias y las fábricas de coches".

Si es que se veía venir... El sistema bancario no podía prestar dinero a miles de personas continuamente, sin garantías de que pudieran devolverlo. Pero la culpa es nuestra por haber aceptado esos créditos. Yo estoy aburrida de contestar el teléfono y decirles que "no me interesa, gracias". Pero el problema es que los vendedores van a comisión, así que siguen insistiendo todos los meses, hasta que picas. Y mientras los especuladores, como siempre, sacando beneficio de las desgracias ajenas.

Conoce a tu enemigo

Estoy asombrada porque ayer me entraron 89 visitas en el blog, así que tendré que publicar otra vez. Esto es un respuesta al comentarios de Javier Pérez, hace dos post.

El otro día, en la serie Cuéntame, que me gusta mucho, vi una escena que me hizo gracia. El nuevo director gerente es un chico un poco estirado de una familia muy tradicional, pero le gusta la peluquera del barrio. En una celebración estaba todo el mundo bailando en la calle un poco subidos de copas y ella le mira y le dice:

¿Bailas? --- y, naturalmente piensa que le va a decir que no, porque está fuera de lugar. Pero él le contesta:

Un Arias Terreiros baila lo que haga falta.

Cuando hablaba sobre cerrar mi puerta y tirar la llave, era sólo una expresión. No pienso mantener a mis hijos aislados de la realidad, como tampoco mis padres hicieron conmigo. En mi casa había un lema: cada cual tiene que aprender de sus propios errores. Para tener las ideas claras es imprescindible estar bien informado. Por eso mis hijos ven programas como "El hormiguero", aunque a veces me parece que allí necesitan un psiquiatra, porque están obsesionados con los genitales.

Si algo tenían claro en mi colegio y el de mi marido es que teníamos que estar preparados para cualquier circunstancia (bailar lo que haga falta). Eso explica que él se sienta tan cómodo en la cola del supermercado, como dando una conferencia en inglés para cien personas. Una parte fundamental de la educación de los hijos debería ser enseñarles a moverse en cualquier ambiente. No se puede tener unos principios morales basados en el dogma, porque, en ese caso cualquier argumento serviría para rebatirlos sin dificultades.

Unos hijos que vivan en un burbuja protectora son presa fácil de las modas del momento, igual que alguien que no salga a la calle habitualmente, sería víctima de todos los virus. Naturalmente, intento que lo que vean esté al alcance de su comprensión y además lo vemos juntos, por si surgen dudas. Sin embargo, cuando tengan 18 años serán libres para actuar y, si deciden como yo, practicar la templanza, no será porque no tengan oportunidades de sobra, como yo también las tuve, sino porque tengan muy claras las opciones y las consecuencias de sus actos.

Templanza

No tocaba publicar hoy, pero en cierto modo sigo con el mismo tema.

Templanza: Virtud cardinal que induce a refrenar la sensualidad y usar de todas las cosas con moderación. Me gusta creer que es una de las principales características de mi personalidad. Cuando habla de sensualidad, se refiere al disfrute de todos los sentidos. Por ejemplo, hace tiempo yo pensé en hacer una dieta para adelgazar y me llevé una sorpresa: si comía lo que me decían, realmente estaba comiendo más cantidad de lo habitual, especialmente en la cena, porque yo ceno muy poco. Cuando voy a restaurantes, siempre me sobra un montón de comida (porque no voy a los modernos), y me da lástima dejarla en el plato. Da la impresión de que la gente come más de lo necesario, especialmente en el norte de España.

Con el alcohol sucede lo mismo. Una cosa es tomarse una copa de vez en cuando y disfrutarla, y otra muy distinta es beber por beber, todos de la misma botella durante horas. Fumar de vez en cuando es una tontería, pero no pasa nada, mientras que fumar en cantidad es peligroso para la salud. El deporte moderado es muy aconsejable, pero no el exceso de deporte. Y así con todo, internet, los videojuegos, el móvil, la televisión e incluso el trabajo. Lo curioso es que cada vez que alguien cae en el exceso, la naturaleza se encarga de poner las cosas en su sitio. Es terrible por ejemplo el caso de la gente que tiene alergia a la tecnología y tienen que vivir en medio del bosque, lejos de toda fuente de electricidad. Con el tabaco y el alcohol se arruina la salud física y con las otras adicciones la salud mental.

Pero hay también otro tipo de excesos, que yo llamaría emocionales.  En el periódico La Farola viene un informe del Medical Institut de EE.UU, según el cual se ha demostrado que el preservativo sólamente tiene una eficacia del 85% para la prevención del Sida y las enfermedades de transmisión sexual y también produce embarazos por mal uso. De manera que han llegado a la conclusión de que el único método seguro para no correr riesgos graves es el ABC: Abstinencia (retrasar el inicio de las relaciones sexuales) , Be faithfull (fidelidad) o Condón, por ese orden.

Es decir, que la templanza sigue siendo hoy día lo más aconsejable para llevar una vida sana y natural, y eso no significa que te tengas que privar de nada, sino que sepas administrarte y saber lo que realmente quieres y necesitas en cada momento. No dejar que la sociedad de consumo te convenza de que lo normal es tener exceso de comida, de placeres, de bienes e incluso de entretenimiento. Porque en muchos casos, el exceso no se disfruta.

La chica del fotolog

Varias veces he escrito en contra de las relaciones por internet, y siempre me habéis contestado que no estabais de acuerdo conmigo. Naturalmente, vosotros sois todos adultos, y a mí los que más me preocupan son los adolescentes. Sobre este tema, por desgracia, también tengo experiencia directa que no os puedo contar por cuestiones de intimidad. El caso es que cuando he oído esa terrible noticia de la chica asesinada en Ripollet, he pensado que tenía que volver sobre el tema una vez más, aunque no os guste.

La niña de catorce años, ya no debía ser muy niña, como suele ocurrir en algunos ambientes. Tenía un fotolog donde colgaba fotos insinuantes, igual que hacían todos sus compañeros. Tenía relaciones con chicos que probablemente no se limitaban a lo que se podía suponer por su edad. El chico que la mató era uno de los que le gustaban, aunque parece ser que tenía novia. Es difícil escribir sobre una persona que ha muerto asesinada, sin que parezca que la estoy culpando de lo que pasó. Por supuesto, ella no tenía ninguna culpa.

No puedo decir lo mismo de los adultos que la rodeaban. Su madre, y su nueva pareja. Su padre. Sus profesores. Su hermano mayor. Los padres de los agresores. La sociedad en general . Un adolescente no es una persona adulta. Aunque suene evidente, esto quiere decir que no se le puede dejar en libertad contando con que va a actuar de una forma responsable. No se puede esperar que vea venir el peligro, porque sencillamente no tiene experiencia. No debe tener la posibilidad de actuar como un adulto, cuando penalmente todavía no es imputable. Y no debería intimar a través de internet con personas a las que apenas conoce, sin ningún control externo.

Ahora dicen que el agresor era un repetidor, típico caso de hiperactividad, déficit de atención y fracaso escolar. Supongo que también descubrirán que era alcohólico y drogadicto. Todo ello me imagino que le servirá de eximente. A mí lo que me preocupa es pensar cuántos chicos más hay como él. Chicos que tienen todos los derechos pero ninguna obligación, que no saben lo que es pasar necesidad, porque lo tienen todo y no lo valoran, que son incapaces de ponerse en el lugar de otro, que se creen que la vida es un juego nada más. Porque tengo tres hijos y a veces me dan ganas de encerrarlos en casa y tirar la llave, y también el ordenador por la ventana. Pobre niña... a los catorce años, víctima de la violencia de género.

Complementos alimenticios

Complementos alimenticios

Tengo una duda terrible: ¿cómo nos apañábamos nosotros hace apenas diez años para ir al vater, si no teníamos yogures de fibra? Me acuerdo que los únicos yogures que tomaba yo eran los blancos de cristal y además me los daban cuando estaba mal de la tripa, precisamente para estreñir. Y pensaréis: ¿a qué viene esta guarrería?. Pues viene a la cantidad de anuncios que tenemos que soportar sobre gente que no puede ir al baño y sufre mucho y además se pone de mal humor. Lo peor es el anuncio del chico que le pasa una barrita a la empleada del mostrador, lo cual no deja de ser una grosería de cuidado.

Una cosa es que el ritmo de vida actual deje menos tiempo para relajarse y "hacer de vientre", y otra muy distinta, insinuar que las mujeres tenemos malas pulgas porque no tomamos suficiente fibra. No me explico cómo las feministas no se molestan con este tipo de anuncios. Porque además siempre son mujeres las protagonistas. Me imagino que debe haber algún tipo de control sobre la publicidad, porque lo triste del caso es que mucha gente se lo cree, y se van a gastar el dinero que no tienen en productos con fibra, pensando que, de no hacerlo, pueden acabar en el hospital con una obstrucción intestinal. Es como lo de asegurar que si no tomamos bífidus vamos a estar siempre enfermos.

Luego está el tema de agregarle ingredientes mágicos a la comida. Sobre eso me han contado un anuncio:

Una mujer a otra: Estás estupenda. ¿Cuál es tu secreto?

Estoy tomando un complejo proteínico, con ácidos grasos, vitaminas y minerales que es una maravilla.

¿Ah, sí?, ¿y cómo se llama?

Carne.

¿Y lo venden en farmacias?

No, lo venden en las carnicerías.

El supermeme

Me he armado de valor para hacer este meme de la página de Superwoman. Se me ha ido el formato y no sé arreglarlo, así que lo dejo como está.

01. Nombre completo: Susana. En el correo comentarios40.
02. ¿Por qué te pusieron ese nombre? Me lo puse porque comentarios estaba cogido y yo tenía 40 años.
03. ¿Le pides deseos a las estrellas? Más bien, rezo.
04. ¿La última vez que lloraste? El día de difuntos, recordando personas.
05. ¿Pan con qué? Me encantan los bocadillos de lo que sea, calamares, por ejemplo.
06. ¿Te gustan los animales? Ya lo sabéis. Más que gustarme, es que los quiero.
07. ¿Cuántos hijos tienes? Tres.
08. ¿Colaboras con alguna ONG? Con Manos Unidas y Ayuda en Acción. Tengo una apadrinada.
09. ¿Si fueras otra persona serías tu amigo? Probablemente, no. Tengo pocos.
10. ¿Tienes un diario de vida? Desde que aprendía a escribir, ya llevaba uno.

11. ¿Eres sarcástico? De pensamiento, pero me callo.

12. ¿Harías puenting? No, ni hablar. Me parece mal jugarse la vida voluntariamente.

13. ¿Cuál es tu cereal preferido? No suelo tomar. Me gusta la avena.
14. ¿Te desabrochas los zapatos antes de sacarlos? Mis zapatos no se abrochan.

15. ¿Crees que eres fuerte? Según el caso. Lo soy más de lo que parezco.
16. ¿Tu helado preferido? El de menta con chocolate.

17. ¿Qué número calzas? 37.
18. ¿Grupo de música preferido? Estopa, Maná, Anastasia, Robbie Williams, ... Son muchos.
19. ¿Qué es lo que menos te gusta de ti? Mi timidez.
20. ¿A quién extrañas mucho?     A mis hermanos.

21. ¿Cuál ha sido la última película que has visto? ¿Entera? Viaje al centro de la Tierra.

22.¿Qué color de pantalones y zapatos tienes puesto? Negro y negro.
23. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste el amor? Como los famosos, no contesto preguntas íntimas.
24. ¿Qué estás escuchando en este momento? Una entrevista con Eduardo Verástegui.
25. ¿La última persona con quien hablaste por teléfono? Con mi madre.
26. ¿Tu bebida favorita? Coca cola.
27. ¿Deporte favorito para ver por TV? No veo deporte, pero sería baloncesto.
28. ¿Comida favorita? Pescado. Especialmente uno que se llama gallo.
29. ¿Final triste o final feliz? Feliz. Para triste, ya están las noticias.
30. ¿Tienes mascotas? No.
31. ¿Día favorito del año? Alguno de vacaciones
32. ¿Besos o abrazos? Las dos cosas.

33. ¿Eres una persona alegre? Procuro sonreir, aunque a veces esté triste.
34. ¿Has viajado mucho?
35. Una fantasía sexual: Paso palabra.
36. ¿Cuál es la última comida que preparaste? Unos filetes con patatas.
37. ¿Color favorito? El verde.

38. ¿Qué viste anoche en la tele? El hormiguero. Les gusta mucho a mis hijos, aunque no es apto.
39. Algo que te haga perder los papeles:     la hipocresía

40. ¿Dónde es lo más lejos que has estado de tu casa? En Hamburgo, o en Marrakech.
41. Algo que te daría morbo hacer: No tengo ideas morbosas. Lo que quiero hacer, lo hago.

42. ¿Eres abiert@ a opciones sexuales como el sexo oral o el sexo anal? Paso palabra.

43. Postre favorito: Cualquiera. Soy muy golosa.

44. Un sitio para desaparecer: Asturias, o Navacerrada.
45. ¿A qué animal le tienes más miedo? Tal vez a los escorpiones.
46. No te gustaría morir sin probar: Sin conocer a mis nietos.
47. ¿Alguna vez te pillaron haciendo el amor? No, por poco.
48. Tu nivel de paciencia de 0 a 10 es: 8, según el tema, a veces 0.
49. ¿Qué libro estás leyendo? Crepúsculo.
50. ¿Alguna vez tomaste drogas? No.

Música universal

Música universal

Ya voy estando mejor. Gracias por vuestros buenos deseos.

Este verano escribí un post que no llegué a publicar. Trataba sobre los quince días que pasé junto al mar en un apartamento alquilado. Al cabo de una semana, descubrimos que había un grupo de música que tocaba en el paseo marítimo casi todas las noches. Se llamaba Equinoccio. Eran de Ecuador y hacían una mezcla entre música tradicional y sonidos electrónicos con guitarras y bajo, una fusión entre pasado y futuro, norte y sur. Nos aficionamos a ellos y acabamos bajando todas las noches a escucharlos y sentimos tener que marcharnos y no poder verlos más, no sólo por su talento, sino por la alegría y entusiasmo con que interpretaban su música, lo mismo para veinte personas que para cincuenta.

Una noche, estábamos intentando grabar la actuación con el móvil, cuando llegó una chica marroquí muy joven, no tendría más de dieciocho años, toda vestida de blanco y con un bebé de pocos días. Se sentó con nosotros y nos extrañó mucho que anduviera sola de noche, aunque conocía a algunos hombres que estaban por allí. Al cabo de un rato se levantó y, de repente, se desmayó y cayó al suelo, con lo que cual hubo que parar la actuación. No fue nada importante, pero me quedé pensando cuál sería su situación y cómo se sentiría viviendo entre gente tan diferente a su cultura. Todo el mundo se preocupó por ella sinceramente.

Cuando veía a los vendedores negros, no podía evitar pensar en la travesía en patera que los había traído hasta allí para poder tener una vida más o menos digna. Todo ello me hizo sentir una vez más ese sentido de hermandad del que hablaba el otro día: que aquellos chicos no eran sino españoles del otro lado del Atlántico, y nosotros mismos somos moros de este lado del Estrecho, unidos por una historia, una cultura común y sobretodo por el simple hecho de ser humanos, más allá de nuestros diferentes acentos y costumbres. En cierto modo, todos estábamos allí unidos en torno a la música. Las canciones que interpretaba el grupo, las cuales yo no conocía, son ahora de mis favoritas, especialmente Lamento boliviano. Os recomiendo que la busquéis en Internet.

Hermandad

He tenido una recaída de los vértigos que sufrí hace un año. Por eso no debo estar más que unos minutos en el ordenador y me temo que no puedo ver los enlaces, pero sí he podido escribir esto.

Cuando hace unos meses alguien me acusó de ser racista, por afirmar que los musulmanes y gitanos tienen diferente mentalidad que nosotros, creo que no conseguí explicarme bien. De hecho, yo respeto absolutamente esas diferencias, siempre que no perjudiquen a terceros. Esto se debe a que, para mí, todos somos hermanos. Considerar a alguien tu hermano, implica que le aceptas tal como es, aunque eso signfique tener que convivir con costumbres que no nos gustan, como el matrimonio concertado, por ejemplo. Frente a la mentalidad que supone que todos tenemos que ser iguales para poder ser amigos, yo antepongo el respeto, pero siempre que éste sea mutuo y recíproco.

Este post me va a servir para que algunos me acusen de homófoba. Quiero sumarme a algunas declaraciones de la Reina, con las cuales estoy de acuerdo, como mucha gente, por cierto. Yo comprendo que existan personas que se enamoran de otros de su mismo sexo y vivan juntos, pero no me gusta que se llame matrimonio, porque para mí es otra cosa. En cuanto a lo del "orgullo gay", me parece un espectáculo innecesario y de mal gusto. Por supuesto que considero a los homosexuales como parte de la hermandad humana y respeto sus costumbres, así que espero el mismo trato.

Si un grupo de heterosexuales organizaran una fiesta donde fueran muchos borrachos o drogados, medio desnudos, con actitudes obscenas y groseras, me imagino que los detendrían por escándalo público. Pero si resulta que son gays y lesbianas, entonces es aceptable. Igualdad significa que riguen las mismas leyes para todos, los mismos derechos y también las mismas obligaciones. La hermandad se basa en la igualdad de los miembros de la gran familia humana: cristianos y ateos, todas las razas y culturas, homosexuales y heterosexuales.

Yo no tengo nada en contra de las personas que viven su condición sexual con naturalidad sea cual sea, sin violencia, ni promiscuidad evidente, ni exhibicionismo, ni proselitismo. Y me consta que muchos homosexuales no se sienten representados en absoluto por los que serían, de algún modo, los extremistas entre ellos. Por tanto, no veo razón para escandalizarse de una opinión privada de una persona, que corresponde al pensamiento de muchos. Creo que los homosexuales se discriminan a sí mismos con esa costumbre de "épatter" (desagradar) que tienen algunos.

Halloween

Halloween

Por razones de salud, me temo que no voy a estar disponible en unos días. Que tengáis un buen fin de semana.

Un año más se acerca una fiesta importada de los EE.UU, donde, sin duda, debe tener algún sentido, pero aquí no lo tiene. En la ciudad donde vivo es el día en que se ven más policías por metro cuadrado, porque los jovencitos y algunos no tan jóvenes aprovechan la ocasión para beber de más y atacar las propiedades ajenas. Mientras, los niños, van de casa en casa aprendiendo el noble arte del chantaje: o me das algo o te hago una faena. Así que, si optas por no abrir la puerta de casa, como yo, te puedes encontrar con un recuerdo como un huevo estampado o una bomba fétida.

Mis hijos han ido alguna vez de Halloween, pocas, pero con la supervisión de algún padre, y solamente por casas conocidas, porque el tema también tiene bastante peligro para los niños. Yo más bien le llamaría la fiesta de "todo vale", porque es una excusa para el desmadre, aprovechando que además van disfrazados. En este día ahora mis hijos solamente salen a casa de amigos, porque los altercados callejeros también son muy habituales. Luego está la bonita costumbre de los petardos, pero no los pequeñitos, sino los gordos que sólo se pueden comprar de forma ilegal, y todos los años se cobran varios heridos, porque tiene que utilizarlos alguien experto.

Así que vas por la calle sobresaltado, pensando cuando se acabará el dichoso día. Claro que por navidades casi es peor, porque además de los petardos algunos niños van por las casas pidiendo directamente dinero. Las máscaras de la fiesta a veces resultan realmente repugnantes y a los niños pequeños les hacen demasiada impresión. Pero lo que no entiendo es esa glorificación de todo lo desagradable. Parece que es un día para divertirse a costa de las víctimas. Decía Arturo Pérez Reverte en un artículo que le recordaban a los heridos de la guerra de Bosnia, donde estuvo de corresponsal.

Sin embargo, debería ser un día triste para recordar a todos los muertos. En otros países han empezado ya a celebrarlo de esta manera, como un homenaje a nuestros seres queridos, dejando lo que tiene de fiesta infantil y olvidándose de lo que tiene, como siempre, de negocio y de tradición importada, que al llegar a nuestro país ha degenerado en otra cosa. Así que espero que cunda el ejemplo y la fiesta de Halloween vaya adaptándose también a nuestras costumbres con el tiempo.

Las abejas

Las abejas

Siempre me sorprendéis. Cuando creo que va a molestar el tema, estáis de acuerdo conmigo, y cuando creo que es inofensivo, a veces alguien se molesta. Bueno, el caso es que me alegro.

Hay un tema que me preocupa bastante y apenas ha salido en las noticias. Parece ser que algunas abejas se están extinguiendo porque la radiación de los móviles hace que se desorienten y no puedan volver a las colmenas. De hecho, yo he visto alguna vez montones de abejas muertas por el suelo.

Los seres humanos, que nos creemos a salvo de todo mal, dependemos en gran medida de los insectos y especialmente de las abejas, para la polinización de las plantas. De nada nos va a servir tener el iphone último modelo si no podemos cultivar los campos. Esos bichos tan molestos tienen la clave de nuestra supervivencia. Así como las charcas estancadas con larvas de mosquito son vitales para la existencia de los pájaros, o acabar con las orugas supone quedarse sin mariposas.

A veces pensamos que los insectos están de más en el planeta, pero la realidad es que ellos son imprescindibles y nosotros, sin embargo, no lo somos. El equilibrio de la naturaleza es tan delicado que la falta de cualquier especie afecta muchas otras. Si no queremos tener serpientes, por ejemplo, es normal que haya plaga de roedores. Las ranas también son fundamentales para el ecosistema, y los carnívoros, como el oso o el lobo. En España aún quedan unos pocos parajes naturales donde la naturaleza sigue su curso sin interferencias y es fundamental conservarlos.

Me da miedo pensar, por mis hijos, no tanto en el famoso cambio climático, sino en las catástrofes naturales que podemos provocar por interferir con los ciclos biológicos animales. Quiero seguir viendo abejas, mariposas y mosquitos, aunque las picaduras me den alergia, aunque sea incómodo y desagradable en ocasiones, como cuando te entran hormigas en la comida. La existencia de los insectos demuestra que las cosas todavía no están tan mal. Así que la próxima vez que encontréis una araña en casa, por favor, haced como yo y sacadla fuera. La naturaleza os lo agradecerá.

Porros

Este es mi diálogo de esta mañana conmigo misma:

Mejor no lo publico, a ver si voy a perder amigos por un tema tan personal como este...

Pero si tengo un blog es para hablar de lo que me importa, y si me voy a quedar callada, mejor lo cierro...

Así que al final ha ganado mi lado malo, o tal vez el bueno... y aquí tenéis el resultado:

La verdad es que no pensaba meterme en más berenjenales este mes..., pero ha surgido un tema que me toca muy de cerca. Suponéis que no tengo información de primera mano sobre la droga, pero por desgracia, yo tengo experiencia de casi todos los temas. No voy a entrar en detalles, pero he convivido con el problema. Un drogadicto es un adicto a las drogas. Teóricamente, si una persona solamente fuma porros de vez en cuando, no es un adicto, pero creo que es bastante habitual fumarlos todos los días. Una copa de vino al día no convierte a alguien en alcohólico, pero un par de cubatas diarios sí. Los efectos de fumar un porro equivalen por lo menos a dos cubatas.

Es como si me dicen que es lo mismo una loncha de jamón de york que un filete. Por calorías, proteínas y demás, un filete equivale a varias lonchas de jamón de york. Por eso, a la hora de conducir, la presencia de droga es suficiente para perder puntos. Las drogas producen adicción, a veces física y otras solamente psicológica. En el momento en que alguien necesita un porro para relajarse antes de dormir o para ir a trabajar, se ha convertido en un drogadicto. Comprendo que algunos queráis pensar que son inofensivos, pero Internet está lleno de información sobre sus efectos negativos a largo plazo, por ejemplo en este enlace: http://www.saludalia.com/Saludalia/web_saludalia/vivir_sano/doc/alcohol_y_drogas/doc/cannabis.htm

Naturalmente, no es lo mismo compartir un porro el fin de semana, que gastarse un dineral en droga. Yo no los he fumado nunca, pero me los han ofrecido muchas veces. Volviendo a Estopa, si Elenilla dice que están bien, yo me alegro mucho, porque no quisiera perderlos por problemas de salud, pero sigue pareciéndome mal que hagan apología de la droga en sus canciones. El que a ellos no les afecte demasiado, no quiere decir que a otros no les pueda arruinar la vida. Y, sin embargo, sus música me siguen gustando mucho.

A veces me confundo

y pico a tu vecina

esa del segundo

que vende cosa fina  (lencería?)

a veces te espero

en el bar de la esquina

con la mirada fija en tu portería...

(Como Camarón)

Qué hacer

Ya estoy acabando con los post del verano y espero empezar a publicar menos, porque estoy emocionalmente exhausta. Este post es antiguo pero vale para cualquier momento de bajón.

Qué hacer... cuando sientes que la llama se apaga y no puedes hacer nada por reavivarla.

Cuando no confías en casi nadie y crees que casi nadie ha confiado nunca en tí.

Cuando no tienes con quién sincerarte, porque no has sabido conservar los amigos.

Cuando ya no te quedan caminos por andar, ni cosas nuevas que aprender.

Cuando tus conocimientos ya no te sirven y sigues sin conocer las respuestas.

Cuando ya tienes tanta gente al otro lado, y algunos a punto de cruzar.

Cuando has perdido la esperanza de que el mundo cambie para bien.

Cuando sientes que tus 42 pesan como 52 de los demás.

Cuando has sentido la impotencia de clamar en el desierto una y otra vez.

Cuando ya no te fías ni de tus propias sensaciones.

Cuando has utilizado todas tu palabras, pero no has conseguido nada.

Cuando piensas que tal vez en alguna encrucijada tomaste el camino equivocado.

Cuando tus hijos empiezan a no contar contigo.

Cuando quisieras dejar de pensar tanto, pero no puedes.

Cuando sientes que la llama se apaga...

La felicidad y la ley

Una vez más y ya os dejo tranquilos con este tema, pobrecitos. Guiño

"La ampliación de los derechos fundamentales es un fenómeno que se ha exagerado en los últimos años, diría que en el siglo XXI, no sólo en España y en Italia sino en todos los países del mundo occidental. Aborto y eutanasia son ejemplos dramáticos, como también lo son el "derecho a no nacer", el "derecho a tener un hijo", el "derecho a casarse". Las causas de este fenómeno son múltiples y concurrentes, pero la que me parece más importante y profunda es que en el origen de muchos de los nuevos derechos hay aspiraciones genuinas de toda persona humana. Todos tienden al inextirpable deseo de felicidad. Sin embargo, dudo de que tales aspiraciones, sobre todo su aspiración más profunda, puedan reducirse a la reivindicación de un derecho. Los deseos y necesidades de la persona humana son por naturaleza insaciables, pero en la mentalidad actual la infinitud del deseo y de las exigencias humanas se confunden con una ausencia de límites. La aspiración a la felicidad, a la que ningún ordenamiento jurídico podría pretender dar respuesta, se ve fragmentada en una multitud de promesas, como si la suma de miles de satisfacciones infinitesimales pudiese aplacar la sed de infinito de la persona humana. Se confunde la amplitud del deseo humano con la cantidad de sus manifestaciones, y así se allana el camino hacia un nuevo consumismo de derechos. Se genera en las personas una pretensión: aquello que deseo -la vida y la muerte, el hijo, la pareja- debo tenerlo garantizado. El daño más grave es lo iluso de las promesas: como ya intuía la Declaración de Independencia americana en 1776, lo que las personas persiguen a través de los derechos es, en definitiva, la felicidad. Y esto no es algo que un estado o sistema jurídico esté en condiciones de asegurar o prometer". Marta Cartabia

Yo diría incluso que la felicidad no se consigue por tener muchos derechos, sino más bien al contrario. La felicidad es el estado que se logra cuando sabes que has hecho todo lo que estaba en tu mano por que las cosas fueran mejores para tí y para los demás. Por ejemplo:

A. Es bueno que haya divorcio cuando la pareja no tiene solución, pero sólo cuando estás seguro de haberlo intentado.

B. Mi marido no podría ser feliz si no supiera que estuvo junto a su hermano luchando por su curación hasta el final.

C. Después del aborto queda toda una vida para recordar lo que has hecho y el trauma es para siempre.

Así que ni el divorcio, ni la eutanasia, ni el aborto garantizan la felicidad de las personas. Son más motivos de sufrimiento añadidos los habituales de cada ser humano. La búsqueda de la satisfacción de tus derechos y tu placer por encima de todo lo demás, sólo lleva al vacío. Tengo otra canción de Estopa sobre esto, que me inspira mucho. Ya sabéis que los de Estopa son presuntamente drogadictos y supongo que eso explica sus sentimientos.

Si es que la vida es la h.....,
yo no se porque estoy triste.
Tanta pena!
Si la vida es tanta h.....,
porque me miro las venas,
y la sangre se me amontona.

Y luego miro pa’arriba,
para cargar la pistola,
matar dos mostruos de un tiro,
el primero es la agonía,
y el segundo es el vacío.
Donde me quedo tos’ los días.

(monstruos)

No hay que viajar más

No hay que viajar más

Hablando de la crisis del petróleo, dentro de poco los viajes largos van a ser prohibitivos. Hay una agencia de viajes con una publicidad que no me gusta nada, donde ridiculizan a la gente por no conocer datos de cultura general. "Hay que viajar más". No. Hay que leer más, estudiar y ver documentales culturales de los buenos. No es necesario ir en persona a esos lugares.

Viendo las playas del Mediterráneo, me pregunto por qué tanta gente viaja diez horas y paga 2000 euros por tumbarse en otra playa parecida en el Atlántico o el Pacífico. Hay quien conoce los lagos de Suiza, pero no el lago de Sanabria en Zamora o los pantanos de León y Palencia. Hay quien viaja a países islámicos, pero no han visitado la Mezquita de Córdoba o la Alhambra. Pasean por Central Park, y no han ido al parque de María Luisa en Sevilla. Y es que todo lo de fuera les parece mejor.

Hay quien ha viajado al Himalaya, pero no saben que en el Naranco de Vulmes hay un funicular que te sube hasta la cumbre. Hay quien visita en Italia todas las iglesias, y es incapaz de entrar en un convento de Burgos, aunque el arte sacro español sea uno de los mejores del mundo.

Muchos viajan a Túnez a ver yacimientos arqueológicos romanos, y muy pocos visitan los que tenemos aquí, por ejemplo en Segóbriga. Algunos ven ciudades amuralladas en Francia pero no han ido a ver Cáceres, Ávila o Lugo. Se impresionan con la selva negra y no saben nada de los bosques de Soria y Salamanca; o hacen surf en Hawai, como podrían hacerlo en Canarias. Admiran los acantilados ingleses y no han visto los de Gerona. Buscan playas vírgenes y no conocen las del norte de Galicia a mar abierto.

Podría dar miles de ejemplos más, tantos como zonas poco conocidas y admirables hay en nuestro país, pero tal vez sea mejor que sigan así porque el turismo masivo las estropearía. De todas maneras, antes de lanzarse a conocer lo ajeno, no estaría mal que al menos conociéramos lo propio.

El petróleo

Hace ya diez o quince años, estaba yo pensando en que el mundo no se tomaba en serio el tema del petróleo que, como se sabe, es un combustible fósil creado durante miles de años y que se está agotando. El problema no es que los países productores suban el precio. El problema es que deberíamos llevar ya tiempo investigando en serio otras fuentes de energía.

Los biocombustibles que están ahora de moda no son la solución y perjudican, como todo, a los países pobres y al ecosistema. La energía nuclear, aparte de ser peligrosa, también se acaba con el uranio. Pero el petróleo no es solamente combustible. Miles de productos que utilizamos habitualmente y a los que no prestamos ninguna atención también se fabrican a partir del petróleo como plásticos, detergentes, fertilizantes y hasta ropa.

Va a ser difícil imaginar un futuro sin esas cosas y no se está haciendo casi nada por sustituirlas. Dicen que tendremos que acostumbrarnos a prescindir del coche, a consumir menos energía, vivir cerca del trabajo o cultivar huertos junto a las ciudades, para evitar los desplazamientos largos. Tal vez salgamos ganando, porque se trata de volver a un estilo de vida más natural y relajado, a apreciar cada cosa en todo su valor.

En los países nórdicos nos llevan mucha ventaja, porque nunca han llegado a caer en la espiral de derroche que sufrimos o disfrutamos nosotros. Allí las ciudades suelen ser más pequeñas pero más regularmente repartidas, la gente se desplazan la mayoría en bicicleta, incluso cuando llueven. No abusan de la calefacción aunque haga más frío y cultivan cerca de las ciudades. Además, están muy concienciados en el tema del reciclaje y el ahorro de plásticos y materiales sintéticos. Así que supongo que ha llegado el momento de que paguemos aquí por tantos años de despreocupación.

Puede que la crisis mundial nos ayude a volver a un modo de vida más natural, sin tanto derroche de energía y de dinero. El lado malo es que, como siempre, saldrán perdiendo los más pobres. El caso es que el descubrimiento de petróleo en los países árabes hubiera sido una oportunidad histórica para sacarlos de la pobreza, pero en realidad sólo ha servido para que unos pocos malgasten y derrochen la riqueza que pertenecía a todos, como contaba en el post anterior.

Comentarios

No tengo idea de por qué en estos dos artículos no permite comentar. Así que podéis comentar aquí si queréis. Besos.

Isla moda

Hay noticias que te hacen perder la fe en la humanidad y ésta es una de ellas: parece ser que en Dubay van a construir una isla dedicada a la alta costura y los complementos de lujo. Firma este proyecto el diseñador de moda Karl Lagerfeld.

Teniendo en cuenta que las mujeres de los Emiratos Arabes, al menos en público, van vestidas con túnicas de la cabeza a los pies, se sobreentiende que no van a poder disfrutar de esas tiendas, que serían solamente para ricas ociosas del primer mundo. No habrá otra cosa en que gastarse el dinero, sin ir más lejos, allí mismo en Oriente Medio, donde convive la opulencia con la miseria.

Por ejemplo, podrían empezar por pagar a sus empleados, en lugar de tenerlos en régimen de semiesclavitud. A veces pienso que no tenemos remedio y nos merecemos lo que nos pase, pero entonces me acuerdo de la gente que dedica sus vidas a mejorar en lo posible las de los demás, y espero que compense. Desde luego, este diseñador debería pensarselo dos veces antes de embarcarse en algo así, pero está claro que el dinero es lo que mueve el mundo.

(He traducido el artículo, para que también lo lean en el extranjero)

Fashion island

There are news that make you loose your faith in humanity. This is one: somewhere in Dubay, they are going to build an island dedicated to hight fashion and luxury lifestyle fits. This project is signed by Karl Lagerfeld.

Taking in account that women in the Arabian Emirates, at least in public, wear black robes from head to feet, I understand that they will never enjoy these shops, that will be only used by healthy women from the first world. Perhaps, there isn’t another better way to spend money. For example, there in the Middle East, where opulence lives with misery in the same place and time.

They could begin by paying salaries to their employées, instead of having them as half slaves. Sometimes, I think that this world has no cure and that we deserve everything that happens. But then, I think about the people who dedicates their lives to improve other’s conditions, and I hope it will be worth. This fashion designer should think twice before conducting this project, but as it’s well known, money rules the world

Homenaje

Este blog está de luto por los tres niños del barco de Valencia. No me siento con ganas de seguir hablando del tema, así que he cerrado los comentarios. Traigo dos canciones. La primera es de Estopa y está dedicada a las madres solteras.

Soy una gota de lluvia
soy un cigarro apagado
soy una pagina sucia
soy un cuchillo oxidado
soy el sol de media noche
soy el miedo de la gente
soy un accidente de coche
soy locura de tu mente
yo no soy,yo no soy,yo no soy,yo no soy
ni siquiera un pobre parasito agonizante
que me muero,que me muero,que me muero,
que me muero,no es que no quiera ¡que va!
es que no quiero mirarte
ya me voy,ya me voy,ya me voy,ya me voy
me vuelvo a mi agujero negro a incrustarme
y en el vientre,en el vientre,en el vientre,
en el vientre de mi redentora ¡madre!

La segunda es de Shakira y trata sobre el aborto.

Ese día llegaste un poco mas de las diez
pero el susto se dio unas semanas después
cuando te confirmaron tus terribles sospechas
un niño nacería y ya sabías la fecha

y antes de que el vecino y la familia supieran
fuiste donde el doctor a acabar con el problema
hoy tu vecino esta en casa dándose un buen duchazo
y tu dos metros bajo tierra viendo crecer gusanos.

Pero si a la hora del té
nada pasa,
sólo te irás lejos de casa
por haber traído un habitante más
a ingresar a esta podrida ciudad
donde lo que no se quiere se mata.

Los niños ya no sufren, pero sus madres tendrán que seguir viviendo con lo que han hecho. No quisiera estar en su lugar.