Blogia

sigo a contracorriente

Enlace al nuevo blog


http://www.sigoacontracorriente.blogspot.com


He visto que habéis entrado en el otro blog, pero no tengo apenas comentarios. Así que he pensado que tal vez creéis que sólamente voy a publicar los que me gusten. Conociéndome es un poco raro, porque tengo el otro blog lleno de opiniones negativas, como se puede comprobar, y siguen ahí. He borrado aquellos que tenían un tono ofensivo, nada más.

Si no quisiera que me lleven la contraria, escribiría sobre las flores; pero yo escribo sobre temas polémicos y no sigo la opinión generalizada hoy en día. Así que no os preocupéis de seguir opinando libremente. Moderar los comentarios me permite estar más tranquila en el sentido de que sé que, si no he podido entrar ese día, no hay nada en el blog que no quisiera que esté.

El blog es, en cierto modo, una prolongación de mi casa y, una cosa es que no limpie mucho, y otra que quiera que me traigan basura, en forma de descalificaciones personales o faltas de respeto. Aunque los habituales ya sé que no me dais problemas, hay mucha más gente fuera. Esa es la razón de que quiera moderar este blog, pero espero que todo siga como antes.

Sorpresa


Me voy de blogia. Por dos razones: porque quiero habilitar moderación de comentarios y aquí no se puede; porque, hace cosa de un mes, me salió un anuncio gráfico de contactos en mitad de la página, escribí a blogia para quejarme, y me dijeron que si quería irme, que me fuera. No lo he hecho antes porque me daba pereza. Estaba yo aquí haciendo patria con la única plataforma española, pero ellos se lo pierden. Mi nueva dirección es: sigoacontracorriente.blogspot.com

(Este artículo no es mío. Es de Carmen Posadas. La verdad es que no pensaba escribir sobre el tema, porque es darle demasiada importancia, pero esto es como si lo hubiera escrito yo misma):

Hablando el otro día con mi hermana Mercedes de lo divino y de lo humano (en el menos metafórico sentido de la expresión, en este caso) me señaló algo en lo que yo no había caído. Comentábamos la polémica levantada por la aparición de los llamados ‘autobuses ateos’ y ella decía que lo que más la sorprendía no era su conveniencia o inconveniencia, sino el infantilismo del eslogan. De la frase «Probablemente Dios no existe. Deja de preocuparte y disfruta de la vida», lo que le chirriaba no era ese «Dios no existe», a pesar de que, comprensiblemente, pueda herir sensibilidades. Lo que le llamaba la atención era el resto de la frase, como si Dios fuera un severo profesor o un padre castrante que estuviera allá arriba para aguarnos la fiesta. Porque, vamos a ver, ¿qué quiere apuntar esta gente con lo de «deja de preocuparte y disfruta de la vida»? ¿Acaso quiere decir que como no hay nadie que nos vigile podemos ir por ahí haciendo todo lo que prohíbe la ley de Dios? Muy desinformados deben de andar los promotores de esta iniciativa para ignorar que lo que dicen los Mandamientos es lo mismo que cualquier tratado ético: honrarás a padre y madre, no mentirás, no robarás, no matarás. Tal vez con ese «disfruta de la vida» se refieran estos señores al tan traído y llevado sexto mandamiento, pero hay que estar también muy desinformado para ignorar que el cumplimiento de dicho precepto anda desde hace décadas un poco... laxo, digamos, incluso por parte de los creyentes. Tal vez la desinformación de los promotores de esta iniciativa los lleve a desconocer que lo que defiende la moral de los que creemos es, en esencia, lo mismito que la ética laica, es decir, unas normas de conducta que regulen el comportamiento y las relaciones humanas. Por eso tiene toda la razón mi hermana al calificar esta iniciativa de infantil. Sólo alguien con una mentalidad muy elemental (o muy perversa) puede decir que como Dios no existe ancha es Castilla y vamos todos a hacer lo que nos dé la gana.

Como creyente que soy, siempre me ha sorprendido observar cuál es el peligro de renunciar a las creencias. A mi modo de ver, no se trata de prescindir de Dios, allá cada uno, y no saben lo que se pierden. El peligro reside en no sustituir el código de conducta que acompaña a la religión por otro código laico. Dicho de otro modo, sustituir la moral por la ética, que prácticamente representan lo mismo. Como ya les he contado en alguna ocasión, yo provengo de un país tan poco religioso que la Navidad no se llama Navidad, mientras que la Semana Santa responde al eufemístico nombre de ‘semana de turismo’. En mi colegio no se daba clase de religión y, por supuesto, tampoco había crucifijos. Tal vez por eso, nosotros, desde niños, sabíamos que había algunas cosas que no se podían hacer. Y no porque allá arriba entre los nubarrones negros hubiera un señor de larga barba que amenazaba con mandarnos al fuego eterno si no obedecíamos o si pegábamos a nuestro compañero de pupitre, sino, simplemente, porque no. O, porque, como dijo Kant –que no era cura precisamente–, no hay que hacer a otros lo que no nos gusta que nos hagan a nosotros, punto pelota. Y eso no tiene nada que ver con el vicio de las luengas barbas ni con el infierno.

Esos señores, que se han gastado una pasta para exhibir en los autobuses de nuestras ciudades su bonito eslogan, reclaman para ellos el mismo respeto que los creyentes a la hora de anunciar sus creencias, y a mí no me parece mal. Sin embargo, lo que hubiera deseado es que fueran un poquito menos antiguos, menos falsamente progres. Que, en vez de decir «Dios no existe, deja de preocuparte y disfruta de la vida», señalaran algo un poco más inteligente y ético como «Da igual que Dios exista o no, tú tienes la misma responsabilidad para con otros y eso no está reñido con disfrutar de la vida». Esto sí lo encuentro respetable. Lo otro, perdonen que les diga, me parece una provocación tan infantil como bobalicona, nada más.

Tentaciones

En tiempos de mi madre, las chicas no podían salir con un hombre si no llevaban "carabina" que era una tía de ella, generalmente, que les acompañaba a todas partes. Cuando yo era jovencita todavía existía un cierto control por parte de los padres, aunque si querías complicarte la vida lo podías hacer igual. Pero no había ese nivel de tentaciones que existe hoy en día. Siempre ha habido hombres, y algunas mujeres, que se dedicaban a la caza de parejas sin compromiso, pero se les identificaba de lejos porque eran la excepción. Ahora son la norma. Ahora toda relación es temporal mientras no se demuestre lo contrario. Incluso aquellos que tienen una pareja estable, a menudo se sienten presionados para empezar otras relaciones. Hay una gran cantidad de separados y separadas disponibles en el mercado. También hay muchos jóvenes que llegan a los treinta sin mantener una relación duradera. Llega el momento en que las amistades esporádicas se convierten en una forma de relación social más habitual que el matrimonio.

Comprendo que, aquellos que se acostumbran a ese modo de vida, no tengan ningún interés por tener novios y menos por casarse. Lo que no me explico es que, aquellos que ya han encontrado alguien con quien compartir su vida, estén dispuestos a tirarlo todo por la borda por una pasión efímera. Es como si, para ser feliz, hiciera falta vivir siempre en el parque de atracciones, experimentando emociones al límite, tanto positivas como negativas, hasta llegar al punto de que realmente ya no te afecta nada. Tengo un amigo que viaja por todo el mundo y escribe crónicas de sus viajes que vende a las revistas. Yo no podría vivir así. Viajar está bien cuando es una excepción que te saca de la rutina, y luego puedes volver a tu casa a relajarte. Tener que verlo todo, probarlo todo, experimentarlo todo... sólo lleva al hastío. Por quedarte en tu casa y con tu pareja, no significa que te estés perdiendo lo demás. Estás sintiendo las mismas cosas pero con alguien que te importa y que sabes que seguirá allí también en los días grises en los que no pasa nada; y eso no se debería arriesgar nunca por un capricho.
Mañana es carnaval con todo lo que ello significa. Espero que el lunes no tengáis que lamentaros de nada.

Miguel Bosé

Miguel Bosé

Lo que busco en la música es algo original. No me importa el estilo, la nacionalidad o la época. Hay cantantes que saben transmitir sentimientos y darte algo que pensar. La discográfica podrá ocuparse de la promoción y buscarles galas, pero nunca puede crear el talento. Aunque Miguel Bosé como persona me parezca alguien demasiado complicado y no sé qué conclusión sacar; algunas de sus canciones hablan de cosas que todos hemos sentido, pero no sabríamos expresar, como ésta:


Si tú no vuelves
se secarán todos los mares
y esperaré sin ti
tapiado al fondo de algún recuerdo

Si tú no vuelves
mi voluntad se hará pequeña
Me quedaré aquí
junto a mi perro espiando horizontes

Si tú no vuelves
no quedarán más que desiertos
y escucharé por si
algún latido le queda a ésta tierra

Que era tan serena
cuando me querías
habia un perfume fresco que yo respiraba
era tan bonita, era así de grande
no tenía fin…

Y cada noche vendrá una estrella
a hacerme compañía
que te cuente cómo estoy
y sepas lo que hay
Dime amor, amor, amor
estoy aqui ¿no ves?
Si no vuelves no habrá vida
no sé lo que haré

Si tú no vuelves
no habrá esperanza ni habrá nada
Caminaré sin tí
con mi tristeza bebiendo lluvia.
(Si tú no vuelves)


Cuando eres capaz de sentir algo así, es amor verdadero. No confundir con enamoramiento, capricho pasajero o necesidad de cariño no correspondida.

Meme malos recuerdos

Meme malos recuerdos

Este meme tan interesante se lo ha inventado Gypunto y lleva dibujo incluído. Se lo paso a Pikifiore, Sega, simplemente yo, Superwoman y Zaferano.
Mis peores recuerdos son de la muerte de seres queridos: mi suegro, mi abuelo, mi cuñado, mis tíos... Los segundos malos recuerdos son de la muerte de mis mascotas: mi perro, un par de pajaritos que intenté criar y, sobretodo mis tortugas. Cometí un gran error, en un momento difícil se me ocurrió comprar un par de tortuguitas muy graciosas con nariz puntiaguda que se llaman trionix. Había varias cosas que no sabía: por ejemplo que eran carnívoras y muerden, que crecen hasta los veinte centímetros, y que son acuáticas. Eso significa que acabé teniendo un acuario en casa del tamaño de una bañera, el cual tenía que vaciar y limpiar cada tres días. Era un trabajo agotador, pero yo lo hacía con gusto. Lo malo fue que, a pesar de mis cuidados, se murieron las dos. Son unos animales exóticos muy delicados. No los compréis.

Malos recuerdos... Cuando trabajaba, yo era muy inocente por entonces. Me ofrecía para todo y acababa saturada de trabajo, pero, como suele ocurrir, nadie me lo agradecía. Al contrario, me andaban reprochando que no daba abasto y, al ser tan despistada, me costaba mucho acordarme de todos los temas. Me hubieran pillado hoy y no dejo que abusen de mí de esa manera, pero en su momento lo pasé muy mal. Cambié de empresa y me volvió a pasar lo mismo. Malos ratos con la familia, muchos, pero esos no los cuento, porque pase lo que pase existe un cariño que compensa todo lo demás.

Cuando nació mi hijo mayor yo, como madre primeriza, estaba desbordada y tuve la mala suerte de que se pasó cinco meses con cólicos del lactante y no dormía durante el día. Llegó el momento en que yo me apoyaba en una pared y me quedaba dormida. Todavía no me había recuperado del parto, estaba anémica y mi marido justo tuvo una temporada con mucho trabajo. Estuve a punto de claudicar y marcharme a casa de mis padres. Pero salimos adelante, y, cuando cumplió un año yo ya estaba deseando tener otro. Soy masoquista. El caso es que repetí algo parecido, pero con un niño de dos años y un bebé al mismo tiempo. Pero al menos ya no era primeriza y eso ayuda bastante.
Este meme es una buena terapia psicológica.

El juego de tu vida

El juego de tu vida

La civilización romana nos trajo unos niveles de cultura y ciencia desconocidos hasta entonces en la Península Ibérica, aunque eso significara la imposición por la fuerza de otra cultura. Sin embargo, con el tiempo, y cuando llegó su decadencia, emperadores como Calígula fueron un ejemplo de hasta donde puede llegar el desenfreno y la inmoralidad. La civilización occidental como la conocemos también se encuentra en estado decadente, no sólo a nivel económico, sino especialmente a nivel humano. La crisis sólo ha sido una consecuencia de la avaricia desmedida de muchos.

Volviendo a la televisión, es fácil encontrar programas que nos muestran la degradación a la que puede llegar un ser humano, cuando la ambición de poder y el dinero se cruzan en su camino. Algunos se nutren de famosos, cuyo único mérito consiste en haber sido "pareja de". Otros, son gente anónima que no tiene inconveniente en airear sus miserias por un minuto de gloria, alimentando el morbo de la audiencia. Pero el colmo de la miseria moral humana se encuentra en telecinco, en El juego de tu vida. Realmente, no me explico cómo tantas personas se prestan a destruir su reputación por un puñado de billetes.

Delante de sus padres, su pareja y sus hijos, confiesan sus costumbres más asquerosas, sus infidelidades y sus odios. Tendrían que hacer un seguimiento al día siguiente de cuántos se han separado y a cuántos ya nadie les dirige la palabra. Tendrán su dinero (que tampoco es tanto), pero han perdido su dignidad ante toda España, y eso es algo que nunca podrán recuperar. Me pregunto si los productores del programa duermen bien por las noches, si no se sienten como buitres negociando con la carroña. Pero lo peor del caso es, que divulgar las miserias ajenas hace que algunos empiecen a no darle importancia a sus propias culpas, como supongo que también sucedería en la Roma de Nerón.

El meme-premio

Si no recuerdo mal, porque a veces me lío, este meme me lo han pasado Codromix y gypunto. Me niego a poner el dibujo del preservativo, a pesar de que alguna fábrica tendría que darme una medalla (con el gasto que he hecho habrán pagado muchos sueldos). Pero ya sabéis que no promociono eso.
Reglas:
1. Citar seis cosas que nos hagan felices.
2. Pasarlo a seis blogs.

Cosas que me hacen feliz:
1. Estar en casa todos juntos después de cenar o el fin de semana, aunque cada uno esté en lo suyo.
2. Visitar a mis padres. Pasar un rato con ellos y saber que siguen allí los dos.
3. Salir de paseo con mi marido, tomar algo o irnos al cine de vez en cuando.
4. Escribir, escribir, y escribir, y leer blogs y esas cosas tan bonitas que me decís a veces.:)
5. Leer, escuchar música, viajar, practicar idiomas, aprender algo nuevo, hacer taichi...
6. Estar rodeada de naturaleza, ver animales y, mejor aún, tocarlos.

Cosas que me desagradan, (ampliación):
1. Las discusiones sobre los mismos temas con mis hijos, una y otra vez.
2. La distancia, la indiferencia, el relativismo, el pasotismo.
3. Los malentendidos con personas que sólo conocen una parte de mí.
4. La envidia, el rencor, la gente que vive en el pasado y desconfía de todos.
5. El egoísmo, la búsqueda del placer inmediato, la falta de solidaridad.
6. Los padres que se desentienden de sus hijos y luego le echan la culpa a otros.

Como véis, soy un caso, me ha salido demasiado serio, lo contrario de la idea original. ¡Qué le voy a hacer! No tengo el día intrascendente. Para otra vez, intentaré buscar algo más ameno.
Se lo paso a Laurita, Manuel, Mar de luna, Marea, Mónica y Nanny-Ogg.

San Valentín es todos los días

San Valentín es todos los días

Nosotros no celebramos San Valentín. Siempre he pensado que es una fiesta consumista, como tantas otras, aunque eso no quita para que me haga ilusión el día de la madre, la verdad. Para mí todos los días son el día de los enamorados. Os diré cómo podéis reconocernos: nosotros somos la pareja que siempre va de la mano o del brazo, de la cintura cuando éramos más jóvenes. Somos los que nos miramos a los ojos y sonreímos, los que todavía nos besamos en las escaleras mecánicas. Nosotros nos sentamos en el sofá siempre agarrados. Cuando estoy con mis hijos también me dan la mano, o apoyan su cabeza en mi regazo. Les parece lo más natural, porque lo han visto siempre. .

Se dice que el saber no ocupa lugar, yo creo que es el cariño lo que no debe ocupar lugar. Las muestras de afecto nunca están de más y refuerzan los lazos con los seres queridos. Hace poco se han separado unos vecinos míos y no me extraña, porque estaba pensando que nunca les he visto de la mano; es más, creo que en diez años nunca les he visto salir a la calle juntos. Estaban muy ocupados con sus propios intereses. Una pareja no se sostiene sin dedicación y cariño, todos los días del año. Han sacado un estudio, según el cual, algunas parejas que llevan muchos años juntos, siguen produciendo las mismas hormonas que si aún fueran novios y se acabaran de conocer. La cuestión es si siguen juntos porque tienen esa química, o tienen esa química porque siguen juntos. Yo creo sin duda que la segunda opción es la correcta. No debe pasar un día sin estar un rato juntos, sin abrazarnos, por muy cansados u ocupados que estemos. Esa es una de las claves de las relaciones duraderas. Hay muchos que piensan que basta con un rato de sexo, pero el amor se demuestra todos los días, todos los minutos del día.

Recuerdo una vez hace años en Portugal. Cruzábamos la calle abrazados como siempre, por el paso de cebra, y un señor mayor nos paró y nos dijo que daba gusto vernos, que se notaba que estábamos enamorados. Nos ha pasado más veces, también yendo con los niños, nos decían que daba gusto ver una familia tan unida. Se nos nota en la cara que nos queremos y no nos da vergüenza. De hecho, creo que no podría trabajar en la oficina de mi marido, porque acabaría con su reputación, si oyeran los apelativos cariñosos que le dirijo, porque todos los días son San Valentín para nosotros.

No es lo mismo

Sobre el post anterior, me recuerda a un chiste de Cruz y Raya. Un señor va al médico
"Doctor, cada vez que me doy en el dedo con el martillo, me duele. ¿Es grave?..."
Versión lógica: "Pues no se dé en el dedo con un martillo".
Versión española: "Se pone usted esta pomada en el dedo antes del golpe, para amortiguar; y después se toma unos calmantes que le voy a recetar..." (Y más dinero "para la saca" de las farmacéuticas).

Otro tema. Ya sé que no todo el mundo consigue encontrar el amor, ya sé que hay quien es feliz con su trabajo y no necesita más. ¿Cómo voy a decir yo que no se puede estar bien soltero y sin hijos?, ¿diría que los curas y monjas no son felices?. Es como si me dicen que es lo mismo tener un brazo que dos, porque se puede hacer todo con un solo brazo; o que es lo mismo tener un ojo que dos, porque también se ve bien con un solo ojo. Cada cual se adapta a sus circunstancias y hay quien lo tiene todo, y, sin embargo, no es feliz. Hay quien sufre circunstancias adversas y sale adelante mejor que los demás.

Pero desde que los seres humanos se organizaron en tribus, la aspiración natural de una persona ha sido tener familia, amigos y una cierta estabilidad. No es lo mismo tener dos padres a tu lado que uno solo. No es lo mismo un "amigo especial" que compartir toda tu vida con alguien. No es lo mismo ver crecer a tus hijos que dejarlos con otras personas. Son soluciones imperfectas para situaciones imperfectas, pero no deberíamos renunciar a la perfección sin haberlo siquiera intentado. Después de escribir este post, encontré una entrevista a Albert Boadella que decía lo siguiente:

"¿Y qué es lo que ha hecho feliz a A. B.? Y no me venga ahora con que ha sido el dinero.
(Sonríe) Lo que más feliz me ha hecho ha sido encontrar a mi mujer. Dar con una buena compañía. Llevamos juntos desde el 75. Una barbaridad. Los hombres están hechos para vivir en compañía. (...) Entonces, cualquier problema serio se convierte en una chorrada. Dos es un número perfecto..."

Industria farmacéutica

Qué pereza me da meter este post... Pero se supone que escribo para decir lo que pienso, y si me voy a callar mejor cierro el blog... (no sería la primera vez), así que aquí va.

Siguiendo con los anuncios de televisión, hay otro que me choca mucho: el de los herpes labiales. Se supone que cuando una empresa se gasta dinero en anunciar un producto es porque se vende mucho. En toda mi vida habré conocido dos o tres personales con herpes. Es un virus que afecta a gente baja de defensas y realmente no se cura, sino que se queda latente en el organismo. Esto significa que la persona puede contagiar a otros y se transmite fácilmente. Si ahora el herpes se ha vuelto tan habitual para que lo anuncien en la tele, no hace falta que os explique la razón. Es la misma por la cual los antibióticos para enfermedades venéreas se agotan en las farmacias; a pesar de que, cuando entra, el mostrador está lleno de preservativos de todos los colores y sabores, que ya parecen caramelos. También es la misma razón del negocio de los lubricantes vaginales, los cuales me imagino que son muy prácticos para hacerlo de pie en el servicio de la hamburguesería. Son problemas de salud provocados por la promiscuidad sexual.

Han descubierto también que el cáncer de útero se debe probablemente al virus del papiloma humano. Así que han sacado una vacuna para las niñas de catorce años, para protegerlas de algo que se transmite por las relaciones sexuales. Si hubiera fidelidad a la pareja, las probabilidades de enfermar serían menores y la vacuna sería innecesaria. También han estudiado que, con la medicación hormonal posmenopáusica aumenta el cáncer de mama. No es extraño si, una vez más ,estamos actuando en contra de la naturaleza. Llevar una vida ordenada, con pocas parejas sexuales protege de forma natural de muchas dolencias. Por otra parte, hacer las cosas a su tiempo y dejarlo cuando la edad lo aconseja, también evita problemas muy graves. El sexo no es un deporte y no sirve de nada llegar a la meta si no lo has disfrutado. Como todo en la vida, también se aprende con el tiempo, y precipitarse sólo sirve para que traiga más problemas que satisfacciones. La farmacia no es la solución a todos los males, pero lo que está claro es que algunos se están haciendo ricos a costa de nuestros problemas.

Portugal

Se dice que Portugal y España están unidas, pero espalda contra espalda. Como yo de pequeña iba mucho a Galicia, a menudo cruzábamos la frontera y siempre me pareció bastante absurda esa división, ya que hasta el idioma (galaico-portugués) parecía el mismo. De eso sabrá mucho codromix. Yo creo que la historia nos ha dividido más por intereses ajenos que por nuestra propia voluntad. Me refiero especialmente a Gran Bretaña, que desde hace siglos ha considerado a ese país casi como una colonia suya, al menos de veraneo. En un momento dado interesaba mucho dividir la Península Ibérica.

Si algún día se salen con la suya los partidarios de convertir España en un estado federal, me sentiría satisfecha si eso significa que podríamos volver a contar con Portugal e incluso con algún otro país. No sé si será verdad, pero he oído que muchos cubanos y también los saharauis, siguen considerándose españoles. A mí a utópica e idealista no me gana nadie. Yo invitaría a todo el que se quiera unir, aunque eso probablemente signifique crear algo ingobernable. Al menos deberíamos tener una commonwelth propia. Me decían hace poco que no existen razas, sino nacionalidades.

A pesar de que yo siento simpatía por todo el mundo, y precisamente por eso, creo que existen en la humanidad una serie de culturas destacadas que conviene cuidar y mantener: la anglosajona, la francesa, la italiana, germánica, eslava, árabe, china, japonesa, hindú...,y, por supuesto la española. De ellas se derivan otras y hay países que influencias de varias. Ya sé que el patriotismo es otro de los valores pasado de moda, pero yo lo he sentido siempre, con la derecha y con la izquierda. No puedo evitarlo, es algo natural en mí.

Sin embargo, es propio de españoles y de hispanos en general, poner siempre el acento en lo que nos separa y no en lo que nos une, mientras en otras culturas sucede lo contrario. Por eso, dudo mucho que vea el día en que Portugal vuelva a estar unido a España, al menos de modo simbólico. Ni siquiera sé si continuaremos unidos el resto. Sin embargo, me ha encantado la idea de unir las selecciones nacionales de futbol. Para progresar deberíamos formar unidades cada vez más grandes, porque resultan más rentables, aunque no sea por ninguna razón sentimental.

Decadencia moral

Cuando expreso mis preocupaciones, me soléis decir que no tienen tanta importancia. Pero yo estoy muy informada y hay mucha gente que está de acuerdo conmigo. Estos son dos ejemplos:
"Arie Hoekman es el representante del Fondo de Población de las Naciones Unidas en México. Según informa The World Congress of Family recientemente manifestó en un coloquio en México que "el alto índice de divorcios y de nacimientos fuera del matrimonio representa un triunfo de los derechos humanos sobre el patriarcado"". ¿Eso es el futuro que queremos para nuestros hijos?

En este artículo una periodista explica mucho mejor que yo dónde está el problema: "En esta sociedad que nos ha tocado vivir se ha abierto la veda para atacar todas las creencias de las personas menos, la impuesta creencia en la in-creencia (lo cuál no deja de ser una contradicción en términos). Todo esto no es casualidad, más al contrario se ha gestado durante décadas construyendo los cimientos de este nuevo contexto. Para la construcción del nuevo paradigma hay que demoler el anterior -como ha de hacerse para construcción un nuevo un edificio en el mismo lugar que existía otro- y luego llenar el solar baldío con la nueva edificación. Pero,…¿Cómo es el proceso?

Primero, como hemos dicho, hay que des-estructurar y para ello en lugar de negar principio a principio, lo cual sería una tarea larga y tediosa, se considera más eficaz, negar, de raíz, la propia existencia de los principios. Así, de golpe y de un tirón, se introduce en la mente de las gentes que no existen principios absolutos, salvo éste, el de la no existencia de principios y de este modo, acaban demoliendo los pilares estructurales de nuestra vida. Como paso siguiente en esa senda, y con el terreno preparado, surge de manera natural y espontánea, el sincretismo para el que todo cabe. Una cosa y la contraria pueden ser verdad según estos ingenieros de almas. Por cierto, vistiendo y vendiendo, de modo cínico, el sincretismo como tolerancia.

Por último, pasan a la fase de la construcción del nuevo edificio, de la “creencia” en el “laicismo” que la imponen a machamartillo. …. Y todo ello, ¿Para qué?. ¿Para qué pasar del “vive y deja vivir” al apostolado positivo y coordinado de la imposición del laicismo?. Pues muy claro, esta imposición es sumamente útil para generar un hombre cercenado de vida, de intereses trascendentes y, en definitiva, cercenado de la esencia de su ser; un hombre que pasaría a constituirse en componente de masa gregaria sin ningún escrúpulo. Masas que asumen, sin el más sentido crítico, los “dogmas” de la nueva “religión” llamada laicismo, donde el dios es el estado y el poder, encarnado en el gobernante, dispensador de bondades y maldades, dispensador de vida o muerte, administrador de vidas ajenas, donde éste, se alza en dueño y señor de la vida de los otros, perdiendo éstos la libertad.

Los apóstoles del nuevo credo no paran, son tenaces en su empeño, insisten, publicitan la creencia en la in-creencia de todas las maneras, a corto y a largo plazo. En el largo plazo, imponen su laicismo, de modo magistral, *con los medios de comunicación, las productoras de contenidos de series televisivas, y a través de la escuela*. En el corto plazo, hay multitud de campañas publicitarias que nos graban con la persistencia de un diapasón los dogmas del nuevo credo. A ellos, sólo les pedimos una cosa que vivan y nos dejen vivir y a ustedes que disfruten de la vida y dejen de preocuparse, precisamente porque Dios existe.

Inmaculada Sánchez Ramos


(Artículo publicado en www.diarioya.es)"


Creo que esto aclara perfectamente de qué estoy yo hablando desde que empezó el año 2009.

Emociones

Podría haber sido una estudiante mediocre, una secretaria a media jornada, una madre de dos horas al día y una esposa de fines de semana. Elegí ser mujer y madre al noventa por ciento. El otro diez por ciento es para mis aficiones. A eso me refiero con hacer las cosas bien o no hacerlas. Si veo que puedo hacer algo por la ong que valga la pena, seguiré adelante, y si no compensa, entonces lo dejaré. Creo que hay que echarle pasión a la vida. Por eso me gustan los cantantes italianos, como Eros Ramazzotti.

Fuego en el fuego son tus ojos dentro de mí
cuando te veo sé que entiendo todo de tí
¿qué es lo que quieres tu de mí?
¿qué es lo que buscas tú de mí?
dejas tu huella en mi corazón,
yo te siento así.
Quiero morirme, en tus brazos desfallecer,
quiero sentirte cuando tu pecho se va a encender
como dos pequeños volcanes,
quiero sentirlos en mis manos;
donde tu instinto se una al mío, encontrarnos allí...
y las almas se unirán.
La noche es casi perfecta, disfrutaremos la vida los dos
porque estamos buscando amor y el no espera.
Es la emoción más directa que hay
mas, no será infinita porque
somos fuego en el fuego y ya
estamos quemándonos.
Fuego en el fuego, esta pasión, la tuya y la mia;
es casi un juego ya, mezcla de música y fantasía.
Hace subir las emociones, todas las sensaciones;
sube hasta el Sol y, que por tu piel, lo más dulce que hay
y las almas se unirán.
La noche...
Abrazado a tí llenaré mi piel de tu calor latino,
yo te sentiré, así te sentiré.
La historia es esta. La noche es casi...
somos fuego en el fuego hoy,
somos fuego en el fuego hoy.

El meme de las frases de mi vida

Sobre el post anterior, ayer puse la televisión un momento y la chica de Buffy cazavampiros le estaba dando un puñetazo a una camarero, así porque sí. No son impresiones mías, ni es algo exclusivo de nuestro país. Se llama ideología de género, y viene a ser sustituir el machismo por hembrismo.

Este meme tan interesante se le ha ocurrido a La chica de ayer. Se trata de poner las frases que más impresión te han hecho en tu vida. Estas son las mías:

De mi madre: "algunas plantas tardan más en florecer, pero sus flores son las más bonitas". Eso me lo dijo en una época en que estaba con la autoestima por los suelos.

De mi padre: "¿quieres ser de los que mandan o que todos te manden?. Fue cuando dejé de estudiar y me hice secretaria.

De mi marido: "es la diferencia entre la perfección y la medianía". Siempre intenta hacer todo perfecto.

Mi versión de esa frase: "si vas a hacer algo, hazlo bien, y, si no, no lo hagas". Generalmente no lo hago.

De la iglesia: "Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme".

Del colegio: "una madre es el pilar de la familia, donde todos encuentran comprensión, y tiene la importante misión de mantener la paz y la armonía entre sus miembros". Eso me lo dijo una monja que explicaba las matemáticas como nadie.

Del refranero: tantas... me parece que tiene una sabiduría inmensa: más sabe el diablo por viejo que por diablo, a buen hambre no hay pan duro, no por mucho madrugar amanece más temprano, a buen entendedor pocas palabras bastan, más vale pájaro en mano que ciento volando, ...

Otra oriental: "cualquiera puede sentarse en un hormiguero, pero sólo un tonto permanece sentado".

Os animo a que hagáis el meme. Te hace pensar.

Reeducando

Reeducando

Controlar los instintos se supone que es lo que distingue al hombre de los animales. Algunos pensamos que la televisión debería ser algo más que entretenimiento y transmitir valores positivos. Otros, están de acuerdo conmigo pero lo que quieren enseñar es la filosofía de "disfruta del presente y olvida lo demás". Por ejemplo, hay un anuncio de Orange fussion, donde una chica nos cuenta cómo sus parejas la han ido cambiando como persona. Ya es triste que haya tenido tantas relaciones fallidas, pero es peor que reconozca que se va adaptando a la personalidad de los hombres con los que sale. No me parece un ejemplo a seguir para nadie.

En la Sexta hay un programa que se llama "Estados alterados" y, desde luego el nombre le cuadra. Las protagonistas son mujeres independientes que, sin embargo, no viven más que para ligar, salvo una que hace de inocente esposa abnegada. Los hombres de la serie no tienen personalidad ni carácter y se dejan llevar absolutamente por ellas. Las chicas son listas y simpáticas, y ellos son incultos y vulgares. Supongo que esos estereotipos les parecen graciosos, pero tampoco es una buena idea alimentar las tensiones entre hombres y mujeres.

Luego está el recurso de la violencia, que también les encanta en esta cadena. Expresiones como "le mataría a polvos", que a mí me suena más bien a tortura, es del mismo programa. "Te voy a dar un guantazo que el ratoncito Pérez se quedará a vivir en tu estómago de tantos dientes que vas a perder". Es es de Sé lo que hicísteis. Yo debo ser muy rara, pero eso de arrancar dientes a golpes tampoco me hace gracia. En La tira, una cajera le rompe el labio a otra de una bofetada, con sangre incluída, y se supone que hay que reirse.

Estamos en horario infantil todo el tiempo; y luego nos quejaremos de los malos tratos, las relaciones inestables, los divorcios, la violencia escolar, la dependencia emocional y demás. Aunque los programas tengan su gracia, me preocupa que quieran enseñar precisamente esa clase de actitudes. Me parece que prefiero los programas de corazón, donde al menos uno ya sabe lo que puede esperar.

El meme de mis cinco objetos

Me han puesto esta tarea:

"Los nominados deberán poner una foto de, al menos, CINCO útiles que definan su estilo o personalidad. Queda descartada la ropa interior, salvo la explícitamente erótica. Tampoco podrán ponerse complementos demasiado evidentes: bolsos, zapatos, collares o cinturones. Tampoco valen los materiales fungibles: pañuelos de papel, toalllitas, preservativos o similares. Cada uno de los encadenados deberá encadenar (valga la redundancia) a un mínimo de CINCO blogs, y siempre hacer referencia a su blog...

1. El ordenador, aunque lo que me es imprescindible es el blog.
2. Mi cama. Cuando duermo fuera nunca estoy tan cómoda. Me la llevaría de viaje.
3. El coche. Me temo que donde vivo es imprescindible, sobretodo con niños.
4. La televisión. Lo confieso: después de las nueve de la noche no puedo ni leer, sólo ver tele.
5. Algo dulce. Soy tan golosa que no hay postre que no me guste, o pastelito o caramelo.

Siguiendo con mi lista de enlaces, le paso este blog a Engel, Ezne, Hombres y mujeres, Ipodgirl y Krisalys.
Bueno, como ya he terminado, aprovecho para contar mis novedades. Voy a trabajar de voluntaria en una Ong, aunque sólo sea de momento unas horas a la semana. Espero que con el tiempo pueda ir dedicándome cada vez más. De momento, supongo que no tendré problema para mantener el blog al día, pero si véis que estoy un poco desaparecida ya sabéis cuál es la razón. Como siempre ocurre, justo cuando yo tengo planes, tengo a la pequeña en casa con laringitis toda la semana y los otros dos tampoco están bien. Me pregunto si es una señal de que no debería meterme en más historias, o es simple mala suerte.

Anglosajones y latinos

El otro día estuve escuchando en la radio a un corresponsal en EE.UU. que hablaba sobre algo que me recordaba a mis últimos post. Resulta que la comunidad afroamericana es el objetivo hace décadas de una discriminación positiva a base de becas y subsidios sociales, para asegurarse de que tengas las mismas oportunidades de estudiar y alcanzar un buen nivel económico. Pero tienen un problema estructural de difícil solución: no cuentan con el apoyo de sus familias. Parece ser que, entre los anglosajones, pero muy especialmente entre los negros, hay la costumbre de que los adolescentes se independicen muy pronto. La familia no tiene la fuerza de los países mediterráneos y, por tanto, no les sirve de apoyo. Los padres, abuelos y tíos se desentienden de los jóvenes y no se preocupan de sus estudios o sus costumbres. Por ese motivo, la población negra no consigue sacar partido a sus oportunidades. Su porcentaje de violencia, drogadicción y demás está muy por encima de la media.

Desde mi punto de vista, me parece asombroso que una madre o una abuela puedan despreocuparse del futuro de sus descendientes. En casos muy especiales, como Alba, me imagino que sólamente una enfermedad mental puede justificarlo. Sin embargo, en países como Italia, de donde viene nuestra mentalidad, la familia es un valor importante que, bien utilizado, sirve para asegurar el desarrollo personal de cada uno de sus miembros. Ya sé que existen muchas excepciones, pero eso no impide que se cumpla la regla. De hecho los italianos siempre me han parecido un ejemplo a seguir. Basta con visitar su país para darse cuenta de que son gente alegre, optimista, muy familiares y bastante más trabajadores que nosotros. Los italianos nos resultan muy simpáticos y atractivos y, sin embargo, nuestra sociedad cada vez se asemeja más a la anglosajona, y creo que salimos perdiendo con el cambio.

Limpieza y salud

Vuelvo con el consumismo y las costumbres sociales. Dos anuncios: "¿Tienes en tu casa ratones, cucarachas, polillas, hormigas y termitas?" Pues, múdate de casa, porque eso ya es un zoo. Me parece que no cabe nadie más. No se trata de tener la casa llenar de bichos, más que nada porque es poco higiénico. Pero entonces aparece el otro anuncio: "¿Quieres acabar con todos los ácaros del polvo que hay en tu hogar?" Pues, no. Con perdón de Codromix, y a pesar de que tengo alergia, a mí esos bichitos no me han hecho nada malo.

Los ácaros del polvo, como todo ser vivo, tienen una función importante que consiste en descomponer las partículas orgánicas que contiene el polvo. Si nos empeñamos en extinguirlos, seguro que tendría consecuencias negativas para el medio ambiente. El hecho de que sean de tamaño microscópico no significa que tengan menos derecho a existir que una hormiga, un perro o un elefante. Una cosa es tener plagas en casa y otra tener que vivir en una burbuja higiénica a salvo de toda suciedad. Los ácaros forman parte del equilibrio de la naturaleza, a no ser que te pongan tan enfermo que no puedas soportarlo. Pero, como norma, no hay razón para librarse de ellos.

En el supermercado, me encuentro con una estantería llena de geles vaginales. Yo pensaba que las mujeres nos lubricábamos de forma natural. Pero ahora resulta que hay que acudir a la industria química para tener relaciones sexuales. Si no te apetece, no lo hagas. No es obligatorio. La solución es tan fácil como eso y mucho más barata. Los geles pueden ayudar en la menopausia, pero no sustituyen a la líbido, y no tiene ningún sentido que se conviertan en un producto imprescindible de la cesta de la compra.

Depiladores que no duelen, perfumes que garantizan el amor eterno, máquinas de gimnasia que parecen aparatos de tortura, métodos para recuperar el cabello, productos mágicos que evitan los catarros, fibras para poder ir al baño, compresas para no oler a pis, remedios para el mal humor, los ronquidos, la flacidez, la edad... Con el dinero que nos ahorraríamos prescindiendo de la mayoría de esos productos milagrosos, ya podríamos salir de la crisis. Hay que aprender a distinguir las necesidades necesarias de las esclavitudes del consumo.

El precio del progreso

El precio del progreso

Supongo que sabéis que los aparatos electrónicos que utilizamos contienen residuos tóxicos. Cada vez que tiramos uno, o bien acaba en un vertedero o lo llevan a reciclar. Muchos de ellos acaban en China, donde el reciclado se hace sin ninguna clase de protección para los obreros que la realizan, lo cual les provoca enfermedades. Los teléfonos móviles contienen algo llamado Coltán, que se extrae de unas minas en África. Su precio ha subido tanto que ha provocado una guerra por hacerse con su control, cuyas principales víctimas son los niños, hijos de los desplazados que huyen del conflicto. Para producir aceite de palma para la bollería que comemos, se están talando los bosques de Indonesia poniendo en peligro de extinción a los orangutanes.

Cada vez que veo anuncios incitándonos a tener el último artilugio del mercado, desechando otros que no tienen ninguna avería, me acuerdo de la cantidad de vidas que está costando su fabricación. Me pregunto qué se podría hacer para arreglar esta situación tan injusta. No podemos parar el tren de la tecnología, pero tal vez podamos ser más responsables con su uso. En mi casa tenemos de todo lo que se vende: grabador de dvd, móviles, ordenador, cámaras digitales y agenda electrónica. Supongo que hemos caído en la trampa y ya no podemos vivir sin esos aparatitos. Lo único que puedo asegurar es que nunca tiramos nada que funcione. Tenemos todavía el vídeo vhs y el friegaplatos tiene quince años, pero es mejor que los que venden ahora, que están pensados para no durar.

Hoy en día sale más barato comprar algo nuevo que repararlo. Vivimos en la cultura del desperdicio. Tal vez, antes de llevarnos las manos a la cabeza pensando en la contaminación y en la desigualdad que existen en el planeta, deberíamos pensar en que no necesitamos tanta ropa, ni tantos coches, ni tantos móviles, ni tanta bollería industrial. Buena parte de los problemas del resto del mundo se deben a nuestro abuso de los recursos disponibles para todos. Pero, la verdad es que yo soy la primera culpable.

Cuarenta y tres

Hoy es mi cumpleaños. Cuando empecé a escribir un blog acaba de cumplir cuarenta. He estado pensando en todo lo que he escrito (una barbaridad) y los conceptos que quería transmitir. He hablado mucho de la familia, de educación, de atención a los niños, el papel de los padres... He hablado mucho de la pareja, de fidelidad, paciencia, comprensión, perseverancia... He hablado de problemas psicológicos, dependencia emocional, manipulación mental, maltrato psicológico...

He hablado sobre religión y religiones, conceptos como el arrepentimiento y la redención. He hecho examen de conciencia. He hablado de tolerancia, respeto a todas las opiniones, diversidad... He hablado sobre nacionalidades, países, continentes, razas y culturas... También sobre la naturaleza en un plano de igualdad: no somos más importantes que otras especies. He hablado de amor universal a todas las personas y todos los seres vivos...

He hablado sobre protección de la vida, desde el primer segundo de existencia hasta el último. También sobre dignidad, honor, patriotismo, y otros conceptos pasados de moda... He hablado mucho de valores universales, en contra del relativismo moral, del pasotismo, de la indiferencia... He hablado de amor al esfuerzo, de sacrificio, de fuerza de voluntad para ponerse unas metas y seguirlas hasta el final... He hablado mucho de amor, de entrega absoluta hasta el último aliento...

Le he dado mil vueltas a algunos temas, del derecho y del revés, desde todos los puntos de vista, intentando que comprendieráis el mío. No sé si lo he conseguido, pero no se puede negar que lo he intentado. He escrito cosas divertidas y otras muy tristes... He copiado textos y canciones que me llegaban al alma... He compartido con vosotros todo lo que soy, y aún se me siguen ocurriendo ideas... Espero que sigamos juntos mucho tiempo más.