Despistes, s.l.
Cuando era pequeña tenía una gran capacidad de concentración y buena memoria. Aún así ya entonces era muy despistada. Ahora lo soy con más razón porque tengo la excusa de la edad. Me las arreglo escribiendo notitas que pongo en la nevera, pero luego se me olvida leerlas. Cuando tenía bebés, preparaba la papilla casera, pero también compraba botes para el caso de que se me quemara la comida, lo cual me ocurría casi todas las semanas. Ahora he renunciado a cocinar lentejas, porque siempre se me pegan al no estar atenta.
En el trabajo estaba agobiada teniendo que estar pendiente de tantas cosas. Una secretaria despistada tiene doble trabajo: acordarse de las cosas y hacerlas. Así que cuando dejé de trabajar me quité un peso de encima. Mientras mis hijos eran pequeños no me quedaba más remedio que llevar la cuenta de todos sus compromisos. Pero ahora que son mayorcitos sigo haciendo lo mismo. Me temo que se han acostumbrado y no hay manera de que se ocupen ellos.
Por ejemplo, empiezan un tratamiento de medicinas y, o se lo recuerdo yo, o se queda a medias. Preparan un trabajo y luego lo dejan en casa y tengo que acercárselo yo al colegio. La mitad de los días se irían sin la merienda si no fuera porque la cojo yo. A veces les bajan las notas por no haber llevado la gimnasia, la bata de laboratorio o la flauta. Luego me reprochan a mí que no me acuerdo, y yo les contesto: suerte que tienes madre para echarle la culpa de todo.
Es que es mucho pedir eso de: mamá, recuérdame que... Las palabras "mamá" y "recuérdame" son incompatibles y ya deberían saberlo. Luego me siento fatal porque no puedo estar en todo de todo el mundo y siempre falla algo. Necesito que pongan algo de su parte. De verdad que hago tantos esfuerzos por acordarme de todo que acabo mentalmente agotada, y cuando falta algo además tengo que salir corriendo a solucionarlo. No ocurre todos los días, pero me estresa mucho.
Parece que es contagioso, porque mi marido también está cada vez más despistado. En cuanto a los niños, dicen que lo han heredado de mí y se quedan tan contentos, sobretodo el mayor. Me pregunto si el día de mañana serán capaces de llevar sus propias casas, o tendré que llamarles para decirles cuándo hay que poner la lavadora y hacer la compra, que si no son capaces de no cambiarse de ropa y quedarse sin comer.
14 comentarios
Javier -
No sé si habrá solución pero desde luego tengo que encontrarla porque mi pareja está apunto de matarme....
Saludos.
afrodita-a -
Yo aunque no tengo hijos siempre digo que eduqué a uno: a mi ex. Era un auténtico desastre cuando llegó a mi. Y años después era una maravilla de orden, limpieza y organización. Lo que hice fue usar truquitos, en lugar de decirle las cosas y estar encima de él protéstandole y recordandole las cosas. Guerra fria, lo llamaba yo.
Así que tranquila, que todos salimos adelante y cuando eso ocurre, valoramos mucho mas lo que hacían por nosotros.
Besitos
Pikifiore -
Marea@ -
Un beso, Marea@
Patri -
Eso sí, los despistes, equivocaciones y fallillos son heredados de mí. ¡¡Todo queda en sdasca!! ^_^
Besotesssssssssssss
La chica de ayer -
Manuel -
Lo mejor, apuntarlo todo, como tú haces. Ya lo dice un viejo proverbio:"Más vale un lápiz corto que una memoria larga".
Un saludito desde Valencia.
laumoma -
Un saludo
acoolgirl -
Un besazooo
simplemente yo -
Angemary -
Y tranquila que tus nenes serán autosuficientes en su futuro, Yo hacía lo mismo, mami esto, mami lo otro.....eso es que te necesitan en su día a día, y eso es bueno.
Muchos besitos
carmncitta -
addicted -
codromix -